La música ilustrativa requiere un trabajo compositivo especial, un ejercicio creativo restrictivo pero estimulante. Este trabajo sólo tiene sentido para mí si la música es lo suficientemente potente como para poder vivir fuera de la imagen, razón por la cual muchas de estas piezas se tocan en conciertos o se utilizan como apoyo educativo. Están disponibles para escuchar en todas las plataformas de streaming.